Un grupo de vecinos y comerciantes de la calle Salta al 500, entre Garay y Golondrina, cortan desde las 17 el paso vehicular para reclamar por la falta de energía eléctrica que sufren unas 50 manzanas del barrio San José desde hace, en algunos casos, una semana.
“El muchacho de la granja tiró cantidad de kilos de pollo, a la señora de la panadería se le quemó la heladera por la baja tensión y tenemos dos casos graves de vecinos: Norberto, un hombre que está postrado, y Luna Milagros, una nena que necesita un trasplante de corazón y no puede estar sin electricidad. No podemos más. Por eso cortamos la calle”, le dijeron los vecinos a Brown On Line. Y avisaron que mantendrán el corte “hasta que alguien se apiade de nosotros y nos escuche. Edesur ni nos atiende el teléfono y llamamos al Ministerio de Planificación pero no nos dan ninguna solución”, dijeron.
Desde Eva Perón (ex Pasco) hasta Virrey Vertiz los comercios tienen baja tensión y directamente sufren el corte de la energía. Algunos pudieron alquilar un grupo electrógeno pero el costo de mantenerlo encendido es alto. “Gastamos 300 pesos para tenerlo encendido apenas cuatro horas”, declaró la dueña de la casa de ropa de Salta y Garay. Stella Marís contó que la heladera de ella y la de su madre, de 90 años, se quemaron debido a la baja tensión.
“Tenemos lsa lamparitas de color naranja, con un hilito de luz”, dijo una comerciante en el corte. “Mi marido comprobó con el tester que la intensidad varía entre 30 y 90 watts de energía por eso se queman los artefactos”, contó una vecina.
Los colectivos que van por Salta desvían su recorrido y vuelven a Salta por El Zorzal. Pero el desorden del tránsito ya empezaba a crecer debido a la cantidad de líneas de colectivo que pasan por la zona y a la falta de aviso del corte.
Algunos locales debieron cerrar, la mayoría mantiene sus puertas abiertas “pero entre la falta de luz y las lluvias no hay venta. No vendemos, no descansamos, no podemos tomar una bebida fresca con semejante calor, no tenemos agua. Por eso estamos acá”, dijo una vecina que con la cacerola invitaba a los vecinos a sumarse al corte de calles y al grito pelado para que Edesur escuche los reclamos y devuelva el servicio.