Agustín Hernández tenía 20 años y vivía en San Francisco Solano, partido de Almirante Brown. El 24 de diciembre al mediodía había ido a Temperley con unos amigos cuando un grupo de al menos tres ladrones los interceptó en el puente que une el este con el oeste de esa ciudad. Agustín y sus amigos se resistieron al robo y los ladrones lo empujaron por las escaleras del puente peatonal de la estación de Temperley.
El hecho ocurrió en el puente que cruza las vía en el ferrocarril Roca en Temperley y une las calles Avellaneda y 14 de julio. Según la familia del fallecido, Agustín cruzaba el puente con dos amigos cuando fue interceptado por tres delincuentes que intentaron robarles.
Los chicos se resistieron y durante el forcejeo, Agustín tropezó y rodó varios metros golpeando su cabeza contra los escalones. Los asaltantes igualmente aprovecharon a robarle las zapatillas y la billetera del joven, que permanecía en el suelo.
Los amigos de Agustín también sufrieron golpes y el robo de sus pertenencias. El chico fue llevado con urgencia a un centro asistencial donde falleció horas después. Una vecina logró capturar el momento en que la víctima era trasladada aun con vida. La causa caratulada como “homicidio en ocasión de robo” se encuentra en la UFI 12 de Lomas de Zamora, a cargo del fiscal Fernando Semisa.