Un delincuente murió baleado y otro fue detenido durante un enfrentamiento con la policía luego de que, junto con dos cómplices que consiguieron escapar, asaltaran a una mujer mientras dormía en su casa del partido bonaerense de Lanús.
El hecho ocurrió ayer alrededor de las 4.15, cuando al menos cuatro ladrones armados y encapuchados llegaron a bordo de una camioneta a una casa situada en el cruce de Arias y Magdalena, en el barrio conocido como Villa Obrera, en ese partido del sur del conurbano.
Según relataron los voceros consultados, los delincuentes se acercaron hasta una de las ventanas de la casa y levantaron la reja de la pared con un cricket, todo sin llamar la atención de la dueña de casa, una mujer de 64 años que vive sola en el lugar y que continuó durmiendo sin escuchar ruido alguno.
Luego de abrir una brecha suficientemente espaciosa como para el paso de una persona delgada, uno de los asaltantes se coló en el interior de la vivienda, fue hasta la puerta de entrada e hizo ingresar a sus cómplices.
Los ladrones se dirigieron hasta la habitación de la propietaria de la vivienda, la despertaron, la maniataron y comenzaron a exigirle que les revelara la ubicación de una suma de dinero que, según dijeron, acababa de cobrar.
Asustada, la víctima obedeció y les entregó alrededor de 135.000 pesos, según consta en la denuncia que más tarde radicó la mujer.
Tras ello, los integrantes de la banda comenzaron a recorrer los ambientes de la casa tomando todos los electrodomésticos y elementos de valor que pudieran encontrar, con la intención de cargarlos en la camioneta en la que habían llegado.
Una vecina escuchó ruidos que le parecieron extraños y llamó al 911, por lo que cuando los ladrones salían con el botín se encontraron con dos patrulleros dependientes de la comisaría 8va. de Lanús.
Los policías les impartieron la voz de alto y les ordenaron que entregaran sus armas, aunque los asaltantes abrieron fuego en su dirección y se inició un tiroteo, durante el cual dos consiguieron cubrir su carrera hasta la camioneta, con la que aceleraron y escaparon a toda velocidad con el dinero en efectivo robado a la mujer.
En cambio, mientras que uno de sus cómplices fue detenido por los uniformados, el cuarto de los delincuentes recibió un balazo, que sólo le permitió recorrer otros 80 metros hasta que cayó al suelo y falleció.
En la zona fueron encontradas dos pistolas usadas por el detenido y el que luego murió, capuchas negras, el gato hidráulico que utilizaron para abrir la reja y todos los electrodomésticos ya listos para meterlos en la camioneta.
Los investigadores trabajaban hoy con la hipótesis de que la banda contó con un “entregador”; una persona que sabía que la víctima acababa de recibir una suma importante de dinero y que les dio todos los datos necesarios para poder dar el golpe.