Por efecto de la inflación que superó la evolución de los salarios, la capacidad de compra de las familias se redujo un 11% en mayo con relación al mismo mes del año pasado. Según un estudio de la consultora FyE Consult, ese registró una nueva baja en el poder adquisitivo de los salarios de 11% con respecto al mismo mes del año pasado.
En el marco del ajuste económico implementado por el Gobierno de Cambiemos, el deterioro del poder de compra de las familias se profundizó en relación a la baja de 9,5% que había sufrido el mes de abril.
El director de la consultora, Hernán Hirsch, manifestó que “el marcado deterioro de la capacidad de compra de las familias obedeció al fuerte incremento de los precios domésticos, que alcanzarían niveles del 42% en mayo, claramente muy superior a los valores observados en abril (40,5%) y diciembre último (27,1%)”.
Asimismo, indicó que la postergación de las paritarias “está moderando el ritmo de incremento salarial interanual” y que la caída en el poder de compra se vio impactada por “la política monetaria contractiva adoptada por el Banco Central”.
Esta caída de la capacidad de compra de las familias coincide con la retracción del consumo que se reflejó en los datos de CAME. En efecto, las ventas minoristas registraron una disminución del -9,2% en mayo, siendo ésta la caída más pronunciada del año. En marzo, la merma fue del -5,8% , mientras que en diciembre último aumentaron un 3,1%.
En cuanto a la evolución de la capacidad de compra, FyEConsult opina que “teniendo en cuenta el comportamiento inercial de los precios domésticos, que seguramente va a registrar en los próximos meses incrementos interanuales superiores al 40%, la postergación de los incrementos salariales, y el menor dinamismo que presentará el crédito al sector privado en los próximos meses, no prevemos una recuperación en las ventas minoristas en el corto plazo”.