Un miembro de la Prefectura Naval Argentina fue asesinado en Villa Fiorito cuando cinco delincuentes intentaron robarle la camioneta y le dispararon en el tórax. Su mujer contó que Carlos Loira había salido por la noche para repartir verduras de un emprendimiento familiar y así evitar que ella saliera.
“Salía a hacer un reparto de verduras cuando lo atacaron y lo mataron, apenas pudo llegar al Unidad de Pronta Atención (UPA)”, indicó Sonia.
“Quiero retroceder el tiempo. Él me decía que no trabaje más, que ya era bastante pero los compromisos de uno son peores, uno busca la manera de salir adelante”, expresó con dolor en diálogo con Arriba Argentinos.
Según relató la mujer, ella estaba por hacer el reparto cuando su marido llegó y le dijo que él se encargaba: “A los cinco minutos me llama una mujer y me dice ‘Sonia, por favor vení, le dispararon a tu esposo’”.
“No pudo recibir asistencia, cuando yo llegué estaba tirado en el piso y una mujer le tapaba la herida con un trapo”, detalló Sonia y aclaró que Loira no se resistió.
Un dato desgarrador es que este domingo la pareja cumplió 28 años de casados y lo iban a festejar: “Como trabajo de lunes a lunes me tomo los martes, pero los dos martes pasados me inundé así que recién martes íbamos a salir. Nos íbamos a tomar el día para festejar nuestro aniversario y hoy estoy sola, quedaron los 28 años nada más”.
“No sabía cómo decirles a mis hijos que me perdonaran, que por culpa de mi trabajo los dejé sin papá”, manifestó Sonia.
“Lo único que quiero es despedirlo en paz, como corresponde, que esos 25 años que le brindó a la Prefectura se hagan ver porque él siempre fue un buen policía, un policía de ley. Él amaba su trabajo. Yo le reclamaba que estaba todo el tiempo con el teléfono solucionando problemas y ahora me quedé sola con mis dos hijos”, finalizó.
Fuentes policiales informaron que el hecho se produjo en la intersección de las calles Mario Bravo y Bucarest.
El oficial ayudante Carlos Loira se trasladaba en su camioneta Renault Duster cuando fue interceptado por delincuentes que iban en un automóvil, que sería un Volkswagen Corsa gris.
Los sujetos se bajaron del vehículo, le apuntaron y el prefecto intentó huir en su rodado, pero no pudo hacerlo ya que le dispararon en varias oportunidades y una de las balas impactó en el tórax.
Loira murió como consecuencia de los balazos recibidos, mientras que los ladrones escaparon sin concretar el robo.
En el lugar trabajaba personal de la Policía Científica y la fiscal Carla Furingo, de la Unidad Funcional de Instrucción (UFI) número 1 de Lomas de Zamora.