El presidente Javier Milei firmó el viernes por la tarde el decreto que prorroga el plazo de las sesiones extraordinarias hasta el 15 de febrero, tal como venía reclamando la oposición durante el tratamiento de la ley ómnibus en el plenario de comisiones de la Cámara de Diputados. Lo hizo ante la evidencia de que no se avanzará en las próximas horas en un dictamen como pretendía para forzar una votación en el recinto.
De todos modos, en el oficialismo daban por hecho un acuerdo con lo que llaman “oposición dialoguista”, vale decir, los diputados que aseguran levantar la mano en una posible sesión.
El principio de acuerdo alcanzado entre La Libertad Avanza (LLA) y los denominados bloques dialoguistas del PRO, la UCR, Hacemos Coalición Federal e Innovación Federal, comprende cuestiones como la metodología de aumento de las jubilaciones, los sectores productivos alcanzados por las retenciones y con qué porcentajes y el detalle de las empresas a privatizar.
Si bien la negociación con la oposición dialoguista avanzó esta semana en Diputados y todo se encamina a lograr la media sanción en una sesión maratónica entre jueves y viernes de la semana que viene, por reglamento el dictamen se debe firmar diez días antes de la sesión.
La posibilidad de dictaminar durante el fin de semana y sesionar el sábado, como pretendía originalmente el oficialismo, se cayó debido a que el Gobierno aceptó este jueves hacer cambios en más de 100 artículos para sumar apoyos del PRO, la UCR y Hacemos Coalición Federal. Por eso reglamentariamente ya no se podía dictaminar entre el lunes y el martes de la semana que viene si no se extendía el período de sesiones.
Entre otros puntos, el Gobierno se comprometió a no eliminar por completo la movilidad jubilatoria y aceptaría que se actualice mensualmente con el IPC que publica el INDEC. También accedió dejar en cero las retenciones a las economías regionales y dejó abierta la negociación sobre la soja, el maíz y las industrias.
Además, una eventual media sanción de la Cámara baja el jueves 25 tampoco dejaría muy poco margen de trabajo al Senado, que tendría apenas cuatro días hábiles para completar la aprobación de la ley.
Durante el período de sesiones extraordinarias el Congreso sólo puede tratar los proyectos previamente estipulados por el Poder Ejecutivo. La novedad de la extensión de las extraordinarias es que Milei incluyó tres proyectos nuevo.