“Estamos muy contentos porque luego de un largo año de trabajo en los controles del agua de nuestra querida laguna hemos logrado que el Municipio de Monte se sume al cianosemáforo”. Con esa frase el colectivo ambientalista “Somos Laguna”, formado por vecinos de San Miguel del Monte, consiguió luego que tras meses de trabajo el Municipio ubicado a 110 kilómetros de la Ciudad de Buenos Aires se sumara al sistema provincial de alerta temprana de Cianobacterias, coordinado desde el ejecutivo encabezado por el gobernador Axel Kicillof.
“Ahora, tanto quienes vivimos en el pueblo como quienes nos visitan puedan tener información en tiempo real del estado sanitario del agua”, contaron los vecinos, que peticionarán ante el municipio la instalación del cianosemáforo en un punto estratégico de una laguna visitada por decenas de pescadores y turistas cada fin de semana, sobre todo en la época estival, por su cercanía con la ciudad de Buenos Aires y con la región sur del conurbano bonaerense.
En la web: https://www.gba.gob.ar/cianobacterias puede verse en tiempo real el estado de la laguna de Monte, que por estos momentos está bajo un alerta naranja, es decir que está en un nivel medio de riesgo y por lo tanto se recomienda “evitar el contacto con las manchas verdes -generadas por las cianobacterias-, lavarse con agua limpia en caso de tomar contacto con el agua y no consumir alimentos que provengan del cuerpo de agua”, según indican los especialistas.
Del programa forman parte otros espejos de agua como el de Lobos, Chascomús, Hinojo, entre otros, que son monitoreados regularmente por el gobierno bonaerense luego de que el Ministerio de Salud enviara un alerta para advertir sobre el potencial nocivo que tiene un curso de agua con exceso de cianobacterias.
“Lo que sigue ahora es instalar un cianosemáforo para que tanto los habitantes de Monte que nadan en la laguna, quienes la usan para refrescarse y quienes nos visitan sepan en qué estado está el agua y cómo proceder al respecto”, dijeron los vecinos.
La iniciativa fue motorizada por un grupo de vecinos luego de que tomasen conocimiento de que no estaba implementándose en San Miguel del Monte el “cianosemáforo”, un sistema de advertencia ante la posible presencia de cianobacterias, organismos nocivos para la salud de quienes toman contacto con el agua de la laguna: de los bañistas, de los pescadores y del público en general que en la mayoría de los casos desconoce el efecto negativo que puede tener en el organismo.
El trabajo de los vecinos de diferentes barrios de San Miguel del Monte se inició el 1 de junio de 2023, en una tarea coordinada con la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la provincia de Buenos Aires, adonde envían muestras de forma periódica, para que esa dependencia pública las compare con sus imágenes satelitales.
El Concejo Deliberante de San Miguel del Monte sancionó una resolución en abril de 2022 en la cual insta a ejercer la función de control de las aguas. A pesar de eso, no había control sobre las aguas. Y por eso los vecinos tomaron la posta. “La inquietud fue extendiéndose a los vecinos hasta consolidar la voluntad general de invertir tiempo y recursos de los vecinos para poder tomar las muestras en diferentes puntos de nuestra laguna.”
Esas muestras se elevan a la consideración del órgano provincial, que es quien aconseja instalar un sistema de alerta, a modo de un semáforo, para advertir ante la potencial presencia de cianobacterias.
¿Qué son las cianobacterias?
De una tonalidad azul verdosa, las cianobacterias son microorganismos que se nutren de la materia orgánica alojada en el agua y realizan fotosíntesis. Las toxinas que liberan pueden provocar una amplia variedad de infecciones gastrointestinales, respiratorias, neurológicas, de la piel, de los oídos y de los ojos. Según el Ministerio de Salud de la Nación, sus efectos más comunes en la salud son vómitos, diarrea, dolor de cabeza, debilitamiento muscular y alergias en la piel.