La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días realizó el pasado jueves una importante donación al Cottolengo Don Orione, de Claypole. Se trata de la entrega de 50 camas ortopédicas, 38 camas hospitalarias para equipar la Unidad de Cuidados Especiales y un ecógrafo con transductores estándar y cardiógrafo.
“Nos invade una inmensa alegría. Formalmente podemos contarles que hemos recibido y ya tenemos en uso: 50 nuevas camas ortopédicas más 38 camas hospitalarias y para equipar al Unidad de Cuidados Especiales: 1 ecógrafo portátil con transductores estándar y cardiógrafo. Agradecemos a la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días por ser parte de nuestra Providencia, por el apoyo y colaboración buscando mejorar la calidad de vida de las personas que viven en nuestra casa y por el compromiso y ayuda concreta.
“Nuestro sueño era poder renovar las camas antiguas y deterioradas por otras nuevas y con mejores prestaciones”, dijeron desde el Cottolengo. De a poco comenzaron a reemplazar las primeras camas en una habitación, luego completaron un hogar y terminando el año cubrieron la mitad de la necesidad inicial.
Jorge Romeu, Gerente de Bienestar y Autosuficiencia habló en representación de los servicios humanitarios de La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, una organización mundial, dijo: “Estos elementos que ustedes ven aquí son posibles gracias a las donaciones de muchas personas que tienen ese sentimiento cristiano de colaborar y que confían en nuestra Iglesia con el objetivo de que esto llegue a quienes realmente lo necesitan”.
Se hizo presente el grupo de Arte con música de la Murga del Cttolengo interpretando melodías que ayudaron a vivir un momento muy especial. Acto seguido se realizó una visita de las autoridades de la Iglesia de Jesucristo a las distintas áreas del Cottolengo donde se explicó las temáticas de quienes participan activamente cada semana en el lugar.
El Pequeño Cottolengo Don Orione tiene una escuela, un hospital y 14 hogares, un salón de fiestas, una huerta, una radio y hasta un cementerio. Para los 360 chicos, jóvenes y adultos discapacitados que viven allí, el Cottolengo Don Orione de Claypole es su casa.
Con sus 50 hectáreas es el mayor de Argentina y alberga a quienes, por sus discapacidades físicas, mentales o sensoriales, no pueden vivir con sus familias.
Presenciaron el acto de donación el presidente de la Estaca Adrogué de la iglesia, Marcos Del Castillo, y su esposa Lorena Steben; los misioneros de los Servicios Humanitarios Élder Cannon y su esposa; el director de Comunicación de la Estaca Adrogué, Jorge Sigal; el director de Comunicación Región Sur, Rubén Molina, entre autoridades del Cottolengo como Jorge David Silanes, el coordinador Técnico, Fernando Montero; el Director Médico, Jorge Palmieri; y la Coordinadora de Actividades de Arte entre personal e internos del establecimiento, Rafaela Martelletti.
Fotos: José Raúl Romero