Para nadie es un secreto que el alfajor es una de las golosinas preferidas por los argentinos. La novedad, es que ahora lo es en todo el mundo, luego de que el reconocido portal gastronómico internacional Taste Atlas lo considerase como la segunda mejor “cookie” (galletita) del mundo, ubicándolo solo detrás de Makroud el louse de Argelia, unas galletas sin harina que consisten en almendras, huevos, azúcar y un saborizante de agua de azahar.
Taste Atlas describió al alfajor como “un sándwich que consiste en dos galletas dulces redondas y desmenuzables con un relleno de dulce de leche o mermelada entre ellas. Luego, la combinación se cubre con una capa de chocolate o se espolvorea con azúcar glaseada”.
Además, aportó algunos datos sobre el origen de su nombre: “El nombre alfajor proviene de la palabra árabe al-hasú, que significa lleno o relleno. Aunque las galletas se pueden encontrar en toda América Latina, son originarias de Andalucía, España”.
“Cuando los españoles llegaron a América, trajeron sus alimentos y tradiciones en el camino, y con el tiempo, casi todos los países de América Latina han adaptado el alfajor español para hacerlo propio”, detalló.
El sitio publicó una lista con los mejores lugares para comer alfajores, mencionando en primer lugar la marca marplatense Havanna. El Café Tortoni y los Alfajores Santafesinos Merengo completaron el podio.
Palabra de expertos
“El alfajor es más que una galletita. Sin desmerecer, tiene protagonismo propio”, dijo la experta Fabiana Ocaranza, dueña de “Milagro del Cielo”, alfajor con el que ganó el Mundial del Alfajor. Y reconoció estar orgullosa de la industria alfajorera argentina. “Hay alfajores, industriales, gourmet, regionales. Para nosotros, significa muchas cosas: reminiscencia, vacaciones, recuerdos de infancia”, dijo.
“Es un embajador cultural. Que lo hayan ubicado en una segunda categoría nos tiene que llenar de orgullo como argentinos”, expresó.