por María Cara Olmos-Telam
Con una populosa vuelta olímpica al potrero donde dio sus primeros pasos futbolísticos Diego Maradona, en Villa Fiorito, el barrio que vio nacer al astro del fútbol mundial, vecinos y vecinas festejaron la consagración de Argentina como campeón del Mundial de Fútbol de Qatar.
“Cómo explicar lo que siento si en este barrio nos corre fútbol por las venas”, dice a Télam Pancho Torres, cantinero histórico del Club Deportivo Estrella Roja, donde Maradona dio sus primeros pasos, todavía en un fútbol de potrero, y que hoy fue sede para ver la final.
Conmovido y “sin palabras”, extasiado por la alegría inexplicable de ver a Argentina campeón del mundo una vez más, Pancho solo atina a dedicar el triunfo a Maradona “que nos guía desde arriba”, para fundirse luego en un abrazo consagratorio con sus compañeros después de una final dramática.
El jugador argentino Gonzalo Montiel convirtió el último penal y en un instante el barrio de Fiorito, en el conurbano bonaerense sur, se transformó en una fiesta popular, exacerbada, de puro disfrute.
Vecinos y vecinas de todas las edades, vestidos con los colores de la albiceleste, se dirigieron segundos después de terminado el partido al club Estrella, para juntos dar una vuelta olímpica empolvada y populosa por el potrero donde Maradona supo desplegar sus primeras gambetas.
“Este equipo es un orgullo, son todos pibitos que tienen una sed de gloria de gloria tremenda y nos llevaron a lo más alto”, expresa a Télam Griselda Alegre, parte de la subcomisión directiva del club.
“La gente acá lo vive con mucha pasión, el fútbol es todo para nosotros”, cuenta la mujer, fanática del fútbol desde chica, y agrega: “Es una alegría enorme y el pueblo argentino se lo merecía”.
“Esto es todo de Messi, que luchó y luchó y hoy nos trae una alegría más”, asegura.