El Concejo Deliberante de Almirante Brown aprobó por unanimidad de todos los bloques el Plan Municipal de Gestión Menstrual que buscará asegurar que todas las personas menstruantes puedan acceder a los productos de salud e higiene menstrual.
La ordenanza, que salió de la Comisión de Géneros y Derechos Humanos del Concejo junto al Observatorio Social y Legislativo de Géneros, tiene como objetivo garantizar el acceso a una salud menstrual informada, saludable y sustentable. Bajo el lema “Menstruar es político”, el plan browniano intentará reparar la brecha desigual en torno al acceso a elementos de higiene que padecen las personas menstruantes.
Para ello, el municipio entregará elementos de gestión menstrual a Centros de Atención Primaria de la Salud, Polideportivos, el programa Envión, a los Centros Integradores Comunitarios e instituciones dependendientes del mismo.
“Si bien este año se puso en agenda la cuestión de gestión menstrual, muchas de nosotras ya veníamos militando esta cuestión para ver de qué manera podíamos hacerla efectiva“, destacó la concejala y presidenta de la Comisión de Género y DDHH local, Andrea Bonetto.
Bonetto explicó que en el tratamiento de la política pública browniana realizaron “un zoom con la participación del Observatorio Social y Legislativo de Géneros local, las diputadas nacionales Daniela Vilar y Maria Rosa Martínez, la diputada provincial Cristina Vilotta y mujeres brownianas interesadas en la temática”.
A su vez, dentro del Plan de Gestión Menstrual se creó el “Programa de Educación en Gestión Menstrual” desde las áreas de Salud, Educación, Género y Diversidades para escuelas primarias, secundarias y de modalidad especial del distrito con el objetivo de promocionar actividades de sensibilización, concientización y formación de docentes y estudiantes acerca de salud sexual y (no) reproductiva.
“La subsecretaria de Educación local, Paula Falcón, cumplió un rol muy importante en su aporte para poder llevar a las escuelas esta temática. Así como lo personal es político, menstruar también lo es“, concluyó la concejala.
Según un estudio realizado por la Organización “Economía Femini(s)ta”, cerca de un 58% de los hogares argentinos cuenta con al menos una persona en edad reproductiva que debe acceder a estos productos con un costo anual que oscilaba entre $ 2.500 y $ 3.000 en el año 2019.