El Senado sancionó la nueva ley de alquileres, que prevé beneficios para 9 millones de inquilinos de todo el país, en una nueva sesión virtual que la oposición abandonó por segunda vez en lo que va del mes, en desacuerdo con la inclusión de temas que entendió que no estaban vinculados a la pandemia de coronavirus.
“Todos los temas son atravesados por la pandemia“, argumentó el oficialismo y votó en soledad la nueva normativa que contempla, entre otras cosas, extender de dos a tres años el tiempo de alquiler y una flexibilización para la presentación de garantías.
La nueva ley de alquileres había recibido media sanción de la Cámara de Diputados en noviembre del año pasado y prevé flexibilizar las exigencias para inquilinos al permitirles presentar dos opciones de garantía.
El aumento del alquiler será anual en base a la combinación entre el índice mensual de la inflación y el de salarios (RIPTE). El depósito de garantía se reduce a 1 mes. Los impuetos pasarán a ser responsabilidad del dueño, entre ellos ABL y expensas extraordinarias.
El o la locadora deberá avisar con 3 meses de anticipación si renueva el contrato y bajo qué nuevas condiciones. Así mismo, la nueva ley introduce que los arreglos hechos por los inquilinos puedan descontarse del alquiler.
Por último, será obligación del locador declarar el contrato ante la AFIP.
La senadora oficialista por Chubut Nancy González mencionó que la ley le otorga también “posibilidades de acceder a vivienda social a mujeres víctimas de violencia de género y a jubilados y amplía garantías a quienes viven lejos de los grandes centros urbanos“.
La otra normativa aprobada ayer fue la que regula la educación a distancia en el marco del aislamiento social, preventivo y obligatorio en todo el país.