Temperley venció 2-1 a Atlético Rafaela por la fecha 21 del Nacional B, en un encuentro que se llevó a cabo en el estadio Alfredo Beranger, con dos goles de Pablo Magnín, mientras que Matías Quiroga había conseguido la igualdad momentánea para la Crema. De este modo, el Celeste llega de buen talante al clásico ante Los Andes, la semana próxima.
De esta manera, el Gasolero alcanzó los 30 puntos en el campeonato, ocupando la 6° posición de la tabla general y en zona de clasificación a Reducido.
Ambos salieron a la cancha a buscar los tres puntos, ya que el empate no le servía a nadie. En consecuencia, el encuentro se tornó de ida y vuelta, con mucha intensidad. De primera, las más claras fueron para la visita, que apostó a los tiros de media distancia.
La más clara de la primera mitad fue para Temperley: Magnín aprovechó una mala salida del fondo de la Crema, y no pudo definir cómodo ante la salida del arquero rival, quien terminó salvando el arco de la visita.
A los tres minutos del segundo tiempo, Magnín tomó la pelota tras un pelotazo largo desde el fondo, encaró a su marcador, le ganó en velocidad, superó su posición, y sacó un remate cruzado.
Rafaela reaccionó tras el gol del local. En los pies de Mauro Albertengo, la Crema intentaba igualar las acciones, mientras que Temperley esperaba un espacio para liquidar el compromiso. A los 17 minutos, el recién ingresado Quiroga, en la primera que tocó, empujó la pelota tras una serie de rebotes en el área y empató el partido. Campodónico, con la visión tapada, nada pudo hacer para evitarlo.
El Gasolero, tras una igualdad que parecía estar lejos por cómo era el desarrollo del juego, comenzó a desesperarse por volver a ponerse en ventaja. Lucas Mancinelli desbordó tras una gran asistencia, pisó el área, levantó la cabeza, y asistió a Magnín, quien solo tuvo que empujarla para poner arriba nuevamente al Cele.
Minutos después, Rafaela lo tuvo por duplicado: primero, con un centro que cayó en Quiroga, quien disparó suave a donde estaba Campodónico. Luego, Albertengo, de media vuelta, sacó una potente volea, que tocó en un rival y fue al tiro de esquina.
A cinco minutos del final, Fattori pudo haber liquidado el encuentro, pero al elevar la pelota por encima del arquero, un defensor apareció y la sacó en la línea, dejando con vida a la Crema.