Con el lema “Si nos tocan a uno nos tocan a todos”, la Agrupación Choferes de San Vicente y la UTA marcharon hoy a la sede del Ministerio de Trabajo provincial en 9 de Julio y Roca, de Burzaco, para pedir la reincorporación de un chofer despedido sin causa y, al mismo tiempo, dejar asentado en el acta la “persecución sindical” y las “suspensiones arbitrarias y despidos mientras achican y recortan servicios”.
“El despido del compañero Victorio Gianella, chofer de la empresa San Vicente, tiene carácter antisindical y persecutorio, y es un ataque de la empresa hacia al conjunto de los choferes, para amedrentarnos y seguir con suspensiones arbitrarias, despidos por goteo, ataques a nuestras condiciones de trabajo, mientras achican y recortan los servicios afectando a los miles de usuarios de las líneas 51, 74, 79, 177, 263, 370, 385, 435, 503.
Dos concejales de Unidad Ciudadana de Almirante Browm, Cecilia Cecchini y Ángel Akike, acompañaron a los trabajadores en la protesta y se manifestaron en contra de la política de vaciamiento de la empresa.
“Exigimos que se termine con el achique de recorridos que implican la destrucción de puestos de trabajo y un peor servicio para los usuarios”, dijeron los choferes.
Por ese mismo tema, un grupo de vecinos se autoconvocó hoy en Longchamps para reclamar ante la empresa el restablecimiento del servicio completo del 74, que desde el lunes llega y parte desde Burzaco y ya no desde la estación de Longchamps, generando un perjuicio a miles de usuarios.
Por eso, el intendente de Almirante Brown, Mariano Cascallares, solicitó ayer al gobierno nacional que intervenga en el conflicto de la empresa San Vicente. “Estamos afectados por la quita de este servicio que afecta a alumnos de universidades de Lanús, de la UBA, trabajadores que se desempeñan en Lanús, a Avellaneda. Afecta el bolsillo de muchos usuarios”, dijo Adrián Cedro, el vecino que encabezó la protesta.
Los recibió un representante de la empresa, que les explicó que piden subsidios a Nación, Los vecinos denuncian que “nos sentimos discriminados los vecinos de Longchamps. Muchos chicos me avisan que tienen que dejar de estudiar porque no tiene dinero para el pasaje porque ahora tienen que tomar dos colectivos“, dijo Adrián el vecino que encabezó la protesta.
Uno de los inspectores de la empresa Marcelo Mars recibió al grupo de vecinos que hoy se llegó hasta la sede de Longchamps. “El acortamiento del ramal se hizo por orden de la CNRT, por eso subimos la frecuencia de la línea 79 y de la 74 misma. Se reformaron los diagramas para poder tener más frecuencias y tratar de cubrir ese vacío. Vivimos del usuario y tratamos de mejorar el servicio”, dijo el hombre ante la periodista Karina Cambiella.
Para tratar de aminorar las molestias, la idea es que las unidades que vengan desde San Vicente entren a la estación de Longchamps, para cubrir el bache que dejó el 74. “Igual siguen saliendo desde Longchamps los servicios de la madrugada”, dijo el empleado de la empresa, que ahora controla DOTA y fue el único que recibió a los vecinos en la puerta de la empresa.
Los vecinos marcaron la falta de compromiso del Ministerio de Transporte de la Nación, que no toma a su cargo del problema y fue quien exigió a la empresa, a través de la CNRT, que cumpla con el permiso original, que era hasta Burzaco.