Trabajadores de la ex Cresta Roja denunciaron que anoche Gendarmería los reprimió violentamente con balas de goma para dejar libre la calle que los operarios interrumpían para reclamar el pago de los salarios atrasados, que no perciben desde hace cuatro meses.
“Hace cuatro meses no cobramos un peso. Lo último que nos depositaron fue pesos. Muchos compañeros salen a hacer cangas, pero no se puede vivir así, queremos que nos devuelvan el trabajo”, dijo entre lágrimas un trabajador con 14 años en Cresta Roja.
“Entraron de una a desalojar, con todo y sin hablar: balas de goma, carros hidrantes, perros, una división de caballeriza. Había más de 40 móviles de Gendarmería”.
La represión se produjo en la Planta 1 de Tristán Suárez, a unas dos cuadras de la ruta 205, en el partido de Ezeiza. “La nueva patronal plantea despedir a 500 trabajadores. El piquete de 300 trabajadores trató de impedir el ingreso de operarios. Hubo represión con balas de goma y actuaron los carros hidrantes, además había gendarmes montados y decenas de carros de asalto.”
Sin vacaciones, con sueldos caídos y sin perspectiva de una solución, la ex Cresta Roja, hoy manejada por Proteinsa, pretende despedir a una gran parte de los empleados, que decidieron resistir en la puerta de la planta del partido de Ezeiza.