La asamblea que debía nombrar al titular de la Mutual del Sindicato de Pasteleros de Caba y Gran Buenos Aires terminó en un escándalo cuando la lista verde oficialista, que responde al secretario general Luis Hlebowicz, atacó, con patovicas y barras, a los opositores que querían denunciar la ilegalidad de la votación.
“En la asamblea el oficialismo quería nombrar a dedo a Ramon Tovani, un nombre que no es representativo de ningún afiliado, a cargo de la mutual que mueve 700 y mil millones de pesos anuales. Cuando llegamos querían impedirnos el ingreso con patovicas y vallas”, cuenta a Brown Online, Gustavo Vega, trabajador de La Salteña de Burzaco y afiliado de la lista opositora Celeste y Blanca.
Las irregularidades comenzaron desde temprano en la sede de la Escuela de Pasteleros de Capital Federal “Nos habían dicho que la asamblea era a las 17 pero ellos llegaron desde mucho antes. Encima a nosotros nos pedían el carnet y el último recibo mientras por una puerta lateral hacían ingresar a patovicas y otras personas sin pedirles nada”.
Según denunció en un comunicado la primera lista opositora al oficialismo en 25 años, “cuando los compañeros que estaban atrás quisieron pasar adelante reclamando que la asamblea no podía empezar sin que entre el total de los afiliados, la gente que responde a la lista Verde empezó a tirarles sillas y botellas hiriendo a los afiliados entre ellos mujeres que fueron con sus hijos, recurriendo a la violencia para suspender la asamblea.”
El ataque de los patovicas dejó 20 heridos, con cortes en la cabeza y contusiones, en medio de una escandalosa asamblea que contó con la presencia de Hlebowicz uno de los 12 apóstoles sindicales que acompañaron al Ministro de Trabajo Jorge Triaca en su gira por Europa donde le prometió una caja de unos mil millones de pesos en materia de capacitación que según denuncian los trabajadores, “nosotros no la vamos a ver”.
Desde la lista Celeste y Blanca, que surgió como impulsó de los afiliados de la empresa La Salteña de Burzaco y cada vez suma más adhesiones de las bases sindicales, advierten que éstas no son las únicas irregularidades. “En poco menos de un mes afiliaron cerca de 1000 nuevos trabajadores de manera poco clara y que por las funciones que cumplen no deberían formar parte de nuestro sindicato”, asegura Calvo.
Esta situación se da a meses de la Asamblea Extraordinaria que en junio definirá el día de las elecciones para renovar las actuales autoridades que deberían ser en diciembre.
“La actual conducción decidió afiliar a todos los empleados del sindicato, mediante esta maniobra creen asegurarse votos allí y llegar sin conflictos a la Asamblea Extraordinaria y las elecciones mismas”, expresan desde la opositora.