Temperley volvió a perder. Esta vez de local, sin fútbol, sin personalidad, sin atenuantes ante un Talleres de Córdoba que controló el partido y lo ganó bien para hundir al Celeste en la zona roja de los promedios y empezar a preocuparse por su continuidad en Primera División, donde suma apenas 12 puntos.
El equipo dirigido por Frank Kudelka, que lleva cuatro éxitos en línea, se impuso con justicia, con una anotación del uruguayo Junior Arias a los 34 del primer tiempo. El Gasolero es la contracara: continúa en zona de descenso con un promedio de 1.055 y acumula dos derrotas seguidas. Para colmo, Temperley será visitante del puntero Boca Juniors en la Bombonera, el domingo a las 19.15.
Los dos equipos salieron a ser protagonistas. El elenco de Turdera arrancó mejor, con presión alta, pero no tuvo mayor profundidad, más allá de un disparo de Mathías Villasanti que tapó el arquero Herrera. Los de Kudelka, con mucho oficio, se sintieron más cómodos cediendo terreno y jugando de contra. Y así empezaron a progresar en el campo, de la mano de un Pablo Guiñazú, activo y determinante, a pesar de sus 39 años.
Antes de convertir la diferencia, el tándem Ortiz-Arias ya había inquietado al arquero Ayala. Pero, a los 34 minutos, un desborde del ex Deportivo Riestra, por el costado izquierdo, encontró al goleador en el medio del área y el uruguayo tocó a la red, con comodidad.
En la segunda parte, el DT Esmerado intentó dotar de mayor verticalidad a un equipo que abusó del pelotazo en los 45 minutos iniciales, con la entrada de Fernando Brandán. Pero no funcionó. Aunque a los 40 del segundo tiempo un tiro de Marcos Figueroa se estrelló en el travesaño.