A la carne porcina de Dinamarca y Brasil que desde hace un tiempo se ve en varias carnicerías, se sumará el inminente desembarco de cerdo desde Estados Unidos a nuestro país, lo cual se combina con la caída de las ventas y el aumento de los insumos, que pone en jaque a los cientos de productores de lechón de Ministro Rivadavia, en Almirante Brown.
“Tres factores impactan en los productores locales: la quita de retención a los granos que hizo aumentar el precio del alimento; la fuerte caída de las ventas y ahora la caída del precio por la importación”, enumera a Brown On Line Leo Davis, ingeniero y jefe de la agencia San Vicente del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA), una entidad que trabaja en conjunto con el Municipio de Almirante Brown en la asistencia técnica a los productores brownianos.
“Así no pueden competir. Los precios no cubren el aumento de costos. Y la importación lleva a la baja de los precios a nivel nacional. El consumidor que le compra un lechón a un productor de Ministro RIvadavia toma como medida el precio de la carnicería. Es un cóctel que desalienta la producción. La situación es compleja”, resume el especialista.
Para saldar esta problemática que puede llevar a la caída de muchos productores locales, el INTA, los productores y el Municipio potencian desde hace unos meses la producción propia para alimentar a los cerdos. “Estamos avanzando en la planta propia de alimentos balanceados, para la cual ya está aprobada la compra de maquinarias”, revela Davies.
La importancia de los productores periurbanos
“El robo de animales golpea la producción. Ocurrió con una familia que producía dulce de leche y ahora compra la leche porque se cansó de que se las roben. De todos modos, son productores que conservan lugares verdes en zonas urbanas. Son productores que producen de forma sana y equilibrada para que puedan vender su carne cerca del lugar que la producen”, dice el especialista del INTA.