La importación de electrodomésticos desplazó a los productos nacionales ganando participación en el mercado en 2016, de acuerdo con un informe elaborado por la consultora Ecolatina y la especializada en investigación de mercados, Key Market. Donde más espacio perdió la oferta doméstica fue en lavavajillas -retrocedió 28%- y afeitadoras -12%-.
“Se espera que tras la fuerte caída de 2016 -el consumo interno retrocedió 19%- las ventas se reactiven en el año en curso como consecuencia de la recuperación del salario, pero nuevamente las importaciones crecerían más que la oferta nacional”, indicó el estudio. La pérdida del poder adquisitivo de los salarios, aumento de las tasas de interés, deterioro del mercado de trabajo y el desplome de los salarios en dólares que se registró en 2016 tuvo como consecuencia una significativa reducción del consumo privado.
En los electrodomésticos la caída alcanzó el 19%, siendo la línea blanca la más afectada con una retracción de 21,5% anual. El sector de electrodomésticos se caracteriza por tener una demanda abastecida principalmente por productos de origen nacional. En la mayoría de los casos, los bienes argentinos concentran cerca de 95% del mercado interno, con excepción de pequeños electrodomésticos donde dicha relación se reduce a 35%.
No obstante, el levantamiento de las restricciones comerciales y la apreciación del tipo de cambio real hacia fines de 2016, permitieron una mayor oferta a precios más bajos de bienes provenientes del exterior. De esta forma, a pesar que el mercado interno se redujo en 2016, las importaciones ganaron espacio y concentraron más cuota de mercado.