Los cortes de luz durante el próximo verano sólo podrán reducirse si -además de mejoras en las redes de distribución- se asegura una mayor oferta de generación de electricidad, el otro punto débil a afrontar, ya que a fines de octubre se registraban una gran cantidad de equipos instalados sin funcionamiento.
Según la información del ENRE (Ente Nacional Regulador de la Electricidad), la potencia indisponible en el territorio bonaerense, el Gran Buenos Aires y el Litoral sumaba tres semanas atrás 3.729 Mw.
Según el detalle relevado por el organismo, el déficit por un menor número de equipos generadores en funcionamiento normal asciende en el Gran Buenos Aires a 1.756 Mw; en Buenos Aires a 1.416 Mw; y en el Litoral a 530 Mw.
En el conjunto, la menor oferta ante la salida de servicio de esos equipos -por distintas razones- se confronta con una demanda de potencia en esa áreas que suman unos 15 mil Mw, el equivalente a 60% del total nacional. Los requerimientos del ENRE a las distintas empresas para asegurar un mayor oferta de generación permitieron cerrar en gran medida la brecha en lo que va de noviembre. Pero los meses venideros serán complejos.
En algunos casos habrá que esperar al mes próximo, e inclusive algunos generadores no tienen fecha estimada para poner de nuevo en funcionamiento sus máquinas paradas.
Durante diciembre volverán a operar equipos de las centrales de la Costa en Villa Gessell (80 Mw hoy indisponibles) y 9 de Julio (22 Mw); Costanera (820 Mw); Dock Sud (28 Mw); y San Nicolás (50 Mw), de acuerdo con la información suministrada al ENRE.
Queda aún por verse, sin embargo, cuándo retornará la generación de equipos de la central Dique (27 Mw), aunque se prevé que será entre enero y febrero, cuando se reparen las fallas técnicas y se resuelvan las discrepancias con contratistas del último arreglo, que aducen dificultades debido a malos montajes y problemas financieros para afrontar las reparaciones.