Hace dos horas empezó en Tribunales de Lomas de Zamora el juicio contra Zaida Mamani, madre de Joselin, la niña asesinada a puñaladas en su casa de Longchamps. «Van siete años de criminalización sin pruebas», dicen las personas que defienden la inocencia de la mujer.
Zaida Mamani está acusada del femicidio de su hija Joselin Mamani, ocurrido en 2019. «A más de siete años del hecho, la causa llega a juicio con una acusación debilitada y múltiples irregularidades, que han sido señaladas de forma reiterada por la defensa», dicen las personas y agrupaciones que defienden la inocencia de la mujer.
«Zaida Mamani es una mujer indígena, migrante y de sectores populares, que ha enfrentado durante años un proceso judicial atravesado por la criminalización, la falta de perspectiva de género y racismo institucional. Desde el inicio, la investigación estuvo marcada por cambios de hipótesis, pruebas erróneas y peritajes que la exculpan, pero que no impidieron que la causa avanzara en su contra», dicen desde el espacio «Justicia por Joselín Mamani».
La defensa, a cargo del abogado Ernesto Flores, «ha señalado que todas las pericias oficiales del Estado resultaron favorables a Zaida: la psiquiátrica descartó toda tendencia violenta, el ADN fue negativo, y el análisis de escritura también la desvinculó. A esto se suman testigos que señalan la presencia de otras personas en la escena del crimen», aseguran.
“El juicio no debería haberse realizado. No hay pruebas para sostener esta imputación”, afirmó Ernesto Flores. Sin embargo, y a pesar de estas inconsistencias, el Tribunal Oral en lo Criminal N°10 de Lomas de Zamora dio curso al juicio que podría extenderse hasta el martes 8 de julio.
«La lucha por justicia para Joselin se entrelaza así con la exigencia de absolución para su madre, en un caso que evidencia cómo opera el sistema penal sobre los cuerpos y vidas de mujeres racializadas, indígenas y pobres. La organización popular, el acompañamiento comunitario y la presencia en los tribunales serán claves para visibilizar lo que este proceso encierra: una madre criminalizada en lugar de ser escuchada», dijeron.










