Unas 500 medias reses, cerca de 45 mil kilos de carne vacuna, valuadas en 225 millones de dólares, es el botín que levantaron, en apenas unos meses, los piratas del asfalto que operan en la zona sur del Conurbano bonaerense y que tienen en vilo a carniceros y matarifes.
En los partidos de Almirante Brown, Avellaneda, Berazategui, Esteban Echeverría, Ezeiza, Florencio Varela, Lanús, Lomas de Zamora y Quilmes se repitió la misma modalidad: un auto se cruza delante de un camión refrigerado, reduce al chofer y descargan la mercadería en un galpón.
Los robos se produjeron entre noviembre y lo que va del mes de diciembre, generando un perjuicio económico y una enorme preocupación entre los empresarios del sector, que salieron a manifestarlo públicamente. Y se suman a los saqueos sobre vehículos accidentados en la vía pública.
La Cámara de Matarifes y Abastecedores manifiesta su profunda preocupación ante el aumento de robos a camiones refrigerados que transportan medias reses”, señalaron mediante un comunicado.
La preocupación trasciende a los empresarios y alcanza al personal, que es sometido a situaciones violentas que ponen en riesgo la vida. Pero también compromete un aspecto crucial para la industria y los consumidores que es la trazabilidad de la carne.