A 112 días de haber sido baleado en la cabeza en la puerta de su taller de Temperley, Leonardo Micheli (44) salió de alta tras estar en coma en el Hospital Bicentenario de Monte Grande. Según publica Infobae en una nota firmada por María Laura Balonga, la víctima no recuerda lo que sucedió. Por el caso, hay dos detenidos e imputados por el intento de asesinato.
“No está para declarar. Habrá que esperar al juicio”, indicaron las fuentes consultadas por este medio la situación de salud del mecánico. El fiscal Marcelo Domínguez aguardaba el alta de Micheli para ver si podía conversar con él sobre lo sucedido. Pero está muy medicado y despertó del coma sin recordar lo que le había pasado. “Los psicólogos les sugirieron a los familiares que sólo le den información que él pida, pero sin detalles”, ampliaron.
Así, Micheli ya sabe lo que le pasó el 21 de noviembre cuando dos personas en una moto llegaron a su taller de la calle Iriarte al 1600, en el barrio de Villa Galicia; y le dispararon en la cabeza. Sabe que existe un video sobre el ataque.
La primera gran noticia de la evolución del cuadro de Micheli había llegado a principios de febrero. El hombre había salido del coma inducido luego de que le redujeran la medicación. Fue entonces que los médicos le preguntaron si recordaba por qué estaba internado en terapia intensiva, pero no sabía. Ahora, con el alta, la familia logra un poco de paz.
Por el ataque al mecánico hay dos detenidos con prisión preventiva. Gonzalo R.E.P., alias “Sindi”, un chatarrero de 21 años sindicado como el sicario que baleó Micheli contó ante la Justicia que fue amenazado de muerte por Federico G.B., el presunto instigador y cómplice, también preso por el intento de homicidio.
Además, “Sindi” dijo ante el fiscal que el plan para matar a Micheli había sido ideado por Federico G.B., quien buscaba venganza porque la víctima, supuestamente, habría abusado sexualmente de una familiar suya.
El fiscal indagó para corroborar la versión de la presunta violación. Domínguez “se entrevistó en consecuencia con familiares de Federico B.G., quienes indicaron que no había ningún pariente que haya sufrido algún abuso sexual”, aseguraron fuentes del expediente.