“Los intereses de los trabajadores están por encima de los dirigentes sindicales”. Con esas palabras, el sindicalista Hugo Moyano empezó su discurso que cerró un día histórico marcado por una multitud que marchó al Monumento al Trabajo, en la esquina de Paseo Colón e Independencia, para reclamar contra los despidos y el ajuste del Gobierno de Mauricio Macri.
Formaron parte del acto Hugo Yasky y Pablo Micheli (de las dos CTA), y Antonio Caló (CGT oficialista). El gran ausente fue el gastronómico Luis Barrionuevo, de la CGT Azul y Blanca, quien se bajó a última hora por la presencia de dirigentes del Frente para la Victoria y el anunció que el domingo irá a comer con Macri.
Antes los 350 mil asistentes, según el cálculo de los organizadores, Hugo Moyano, líder de la CGT Azopardo del disparó al presidente de la Nación, Mauricio Macri. “Los problemas se resuelven con los trabajadores, no atacando a los trabajadores”, disparó Moyano, quien recordó la “flexibilización laboral” de los años ´90 para compararla con la precarización laboral disparada a partir de las políticas del gobierno nacional.
Las otras cuatro centrales sindicales también se movilizaron. Sus líderes fueron durísimos con la administración macrista. Pablo Micheli, de la CTA Autónoma, dijo que si el gobierno de Macri “no entiende el mensaje, no nos va a quedar otro camino que un paro general”. “El plan que tienen es que nosotros paguemos la crisis mientras ellos se enriquecen”, dijo el dirigente que tiene el cuero duro: luchó contra el ajuste del menemismo en los años ´90.
Hugo Yasky, de la CTA de los Trabajadores, quien además habló de la unidad sindical para enfrentar las políticas de ajuste, la inflación y los despidos de Macri. “Hoy empieza una historia distinta, con los trabajadores unidos y de pie. No queremos ver jubilados pidiendo un plato de comida, ni chicos yendo a la escuela sólo a comer”, enfatizó.
Para Antonio Caló, de la CGT oficialista, la unidad es el único camino para hacerle frente al Gobierno de Macri. “Vamos por la unidad. El 6 de junio vamos a reunirnos y el 22 de agosto vamos a hacer un congreso nacional para que ese día tengamos una sola CGT”, adelantó desde el escenario.
Dos velocidades
Por su parte, Moyano habló de los conflictos en dos provincias del sur, Tierra del Fuego y Santa Cruz, mencionó a Uber, el sistema de movilidad que afecta el trabajo de los taxistas, pero se dedicó, sobre todo, a Macri. “El gobierno toma rápidamente medidas para proteger a un sector y tarda en tomar medidas para proteger a los sectores de menores recursos. Le saca las retenciones al agro y no se acuerda de los jubilados ni de los trabajadores. Esto venimos a reclamar. Creemos que debe consultar las medidas con los representantes gremiales”, pidió.
El ex líder de los camioneros recordó “ese perverso impuesto al trabajo” para referirse al pago del Impuesto a las Ganancias. “Este es el reclamo que le hacemos al gobierno. Qué pasa con nuestros jubilados, a quienes le prometieron el 82% móvil en la campaña y no han hecho nada. Es necesario un aumento de emergencia para nuestros abuelos”.
También dijo que nada se hace contra la inflación, cargó contra el tarifazo “de entre el 300 y 500 por ciento”, el aumento del combustible “que es un regalo que le hacen a los trabajadores en su día” y la suba del trasporte público. “No tardan nada en aumentar todo eso, pero demoran una eternidad en responderle a los trabajadores”, comparó.
“Esto, señor presidente, se representa en platos de comida que la gente deja de tener en su mesa. Las familias no son un número que miden sus asesores, son vidas humanas a las que hay que respetar. Espero que reflexione”, fustigó. Y le advirtió: “Vamos a enfrentar a quienes se ponen en contra de los trabajadores. Prefiero el sudor de los trabajadores y no el perfume de los funcionarios de turno”.
Foto: DYN