Hoy, 10 de agosto, Longchamps está cumpliendo 113 años. Ciudad insigne de Almirante Brown, se distingue por ser cuna de la aviación sudamericana y que tiene su propio obelisco. Para homenajearla, aquí va un repaso de su nacimiento y algunas curiosidades: su castillo, el hipódromo y hasta la canción que le dedicó Pappo.
El nacimiento de Longchamps
Su nombre se debe al hipódromo de Longchamps, ubicado en París, Francia, en el que la Sociedad Hípica de Lomas de Zamora se inspiró cuando se habilitó la pista de carreras de caballos que estaba emplazada entre las actuales calles Bolívar, Avenida Longchamps, Los Studs y Sarmiento.
Con la instalación de este hipódromo, y debido a la concurrencia del público en el sector, se instaló -con terrenos donados- una nueva estación del ferrocarril el 10 de agosto de 1910; la fecha que reconoce el nacimiento de la ciudad.
Curiosidades
El hipódromo que se incendió
Un 5 de septiembre de 1910, se inauguraba el hipódromo de Longchamps en las tierras que años más tarde adoptarían ese nombre. Allí, grandes jugadores se juntaban para hacer importantes apuestas y según cuenta el historiador Luis Stoppini, el lugar era bastante cómodo porque “tenía una pista muy extensa, codos bien abiertos y una recta de 500 metros para que la aceleración de los jinetes sobre el caballo sea total.”
Pero luego de la cuarta carrera, un 11 de febrero (en otros registros figura el 13) de 1913, en circunstancias poco claras, un grupo de asistentes destruyó el hipódromo. Las teorías sobre las razones que supuestamente tuvieron los agresores van desde un fallo polémico de la carrera a una acción organizada de una facción política en contra de otra entre los miembros del directorio del Lomas Jockey Club que eran muy conservadores.
Sin lograr su objetivo, los agresores invadieron la pista para evitar que los siete competidores de la próxima carrera desfilaran por frente a las tribunas. De pronto, sin que fuera posible saber quién inició el ataque, volaron contra las tribunas piedras, trozos de hierro y los palos que sostenían el alambrado de la pista y en pocos minutos alguien agarró nafta de un auto y otros llevaron hasta el sitio varias latas de petróleo de un almacén cercano al hipódromo. Antes de las llamas, muchos gritaban: “que se queme como el Longchamps de París”.
La ciudad que es cuna de la aviación
Sucedió que en 1910, un tal Henri Bregi realizó el primer vuelo a motor controlado de Sudamérica; un hecho que dio lugar a Longchamps como la ciudad cuna de la aviación y que, el pasado 6 de febrero, se cumplieron 113 de este épico hecho en el que el joven piloto francés, a pesar de las malas vibras por todos los intentos fallidos de un vuelo que lo antecedieron, tomó el mando del aeroplano Voisín y se echó a volar durante 16 minutos en el viejo aeródromo de Villa Longchamps, convirtiéndose en el primer aviador en dirigir un aeroplano a motor en Sudamérica.
Longchamps tiene su propio obelisco
Como el que se ubica en Capital Federal, pero en Longchamps, hay un obelisco. Se encuentra en la Plaza ubicada entre las calles San Martín, Aviación y Rivadavia, al oeste de la estación de esta localidad. Tiene tres metros de altura y según se dice, llega a la misma altura sobre el nivel del mar que el que está emplazado en 9 de Julio y Corrientes, ya que si imaginariamente tendiésemos un hilo de la punta del obelisco de la Capital Federal a la punta del de Longchamps comprobaríamos que están a un mismo nivel.
La canción que Pappo le regaló a Longchamps
Corría el año 1992 y llovía a cántaros. Pappo iba conduciendo su Chevrolet 400 por la avenida Hipólito Yrigoyen y, a la altura de Longchamps, pinchó una rueda. A partir de eso, nació Longchamps Boogie.“Frené y, mientras me mojaba, busqué una gomería cerca porque no tenía ningún neumático de repuesto”, contó Pappo cuando se cumplieron 10 años de la letra.
El boogie fue estrenado en el Estadio Obras con Pappo como telonero del músico de blues B. B. King. Esa noche, Pappo contó al público que “se me pinchó una goma en Longchamps, llovía mucho y nadie me ayudó a cambiar la rueda”, y casi todos los fans creyeron que bromeaba, pero la relación entre Longchamps y Pappo volvería a tener una cercanía más en el 2009, cuando por el reconocimiento del Boogie se construyó un monumento al cantante en la plaza junto a la estación del Ferrocarril Roca.
El “Castillo Gassiebayle”
Lo que queda de la edificación, que es casi nada, se ubica en la calle Carlos Dihel al 2500. Lo llamaron también como “El Mirador” porque, Maria Laplacette de Gassiebayle, construyó el enorme castillo con una torre de unos 30 metros de los que se veía desde allí casi todos los alrededores.
El famoso castillo que hoy solo unos pocos recuerdan, tenía a un costado una cancha de paleta que por mucho tiempo fue usada por los chicos cuando se convirtió en un lugar abandonado. Según se sabe, la propiedad que tenía una pileta de natación redonda y elevada y a su alrededor afloraba una gran cantidad de árboles, fue heredada por hijos y nietos de la mujer que decidieron venderla en 1974 a la Sociedad Mutual de La Armada.