Operarios de la empresa Megaflex, ubicada en el Parque Industrial Burzaco, llamaron a una “gran acción solidaria” para lograr la reincorporación de los 16 despedidos, ordenada por el Ministerio de Trabajo de la Nación y desoída por la empresa perteneciente al grupo multinacional Saint Gobain.
La actividad será este martes a las 15 en la sede de la compañía (Drago 1760, de Burzaco) dedicada a la fabricación de membranas y los trabajadores llamaron a participar a organizaciones obreras, estudiantiles, sociales, políticas y personalidades de derechos humanos.
“La empresa utiliza los despidos para amedrentar y empeorar las condiciones de trabajo adentro de la fábrica, atacando nuestro convenio. Volvemos a denunciar el incumplimiento por parte de la empresa y que cumpla con el fallo a favor de la medida cautelar, que ordena la reinstalación de los 16 despidos”, dijeron en un comunicado.
“A esta empresa no le importa la salud y la vida de los trabajadores. Comenzó a despedir desde el 11 de noviembre, llegando a hoy con 16 familias que quedamos sin sustento. Despide gente con antigüedad y después contrata gente de manera temporaria y luego los despide, para que nuestros compañeros que están adentro tengan que hacer el trabajo de dos o tres personas”, consignaron en un comunicado.
Denunciaron además las condiciones laborales: “Llevamos más de 12, 14, 16 y 25 años trabajando para esta empresa, que siempre nos hizo trabajar bajo ritmos de producción que terminaron rompiendo nuestros cuerpos, provocándonos graves enfermedades incurables, como EPOC, hernia de disco o tendinitis. Algunos fuimos despedidos estando incluso con ART o a poco de jubilarnos. Estos despidos son ilegales y discriminatorios, y son sólo una muestra de lo que sufrimos todos los laburantes de Megaflex. Por eso estamos en pie de lucha”, dijeron.
“No tenemos para comer y nuestras familias están sin cobertura médica. Por eso decidimos profundizar nuestra pelea por la inmediata reincorporación”, afirmaron.
Al mismo tiempo, la lucha por la reincorporación desnudó otro problema: la falta de compañía de “nuestro Sindicato del Personal Químico y Petroquímico (SPIQYP), que debe ponerse a la cabeza del reclamo y convocar a un plan de lucha para que la empresa acate el fallo cautelar y podamos volver a nuestros puestos de trabajo”.
