En un contexto de crisis económica severa, el Gobierno y la CGT acordaron ayer para que los trabajadores privados y estatales reciban un bono de $5000 desdoblado en dos partes. Pero menos de 24 horas después del anuncio oficial, la Cámara Argentina de la Mediana Empresa advirtió sobre los problemas que tendrán los pequeños y medianos comercios para pagarlo, debido a la baja de las ventas y los tarifazos.
“Los primeros interesados en instrumentar herramientas que fomenten al consumo somos nosotros, pero en la reunión de hoy nuestra postura fue que no todos los sectores pueden afrontar un bono de 5 mil pesos”, señalaron desde la CAME luego de la cumbre que incluyó al Gobierno.
“Para los pequeños y medianos comercios es inalcanzable, por eso desde CAME planteamos seguir dialogando con el gremio para analizar si se aumentan los planes de pago en más cuotas segmentando el tipo de empresa”, advirtieron sobre el plus que habrá que cubrir en noviembre y enero.
Respecto a los despidos, declararon que “estadísticamente las pymes no despiden” porque “les cuesta enfrentar el costo del despido en sí mismo y porque en una pyme se forma un ambiente familiar al tener poco personal y además invirtió mucho en capacitar”.
Por otro lado, a pesar de la aceleración inflacionaria, fuentes oficiales descartaron que los jubilados reciban el bono dado que “representaría un nivel de gasto mucho mayor y la plata no está“. También esta en duda si lo cobrarían los empleados del sector público.
Para el secretario general de la CTA, Hugo Yasky, “el bono de la CGT es un paquete de humo, no existe” y confirmó que el Frente Sindical avanzará en el paro general por 36 horas, tal cual habían anunciado días atrás.