Desde hace 12 días la feria La Salada permanecerá cerrada luego de que Jorge Omar Castillo conocido como el “Rey de La Salada”, y otros 15 líderes del complejo fueran detenidos, acusados de maniobras de lavado de dinero y asociación ilícita. Desde la detención de Jorge Castillo, la feria pasó de ser el corazón que irrigaba el bolsillo de miles de familias, a un lugar de protesta. Ese lugar de protesta será, desde hoy, la Municipalidad de Lomas de Zamora, en Manuel Castro, entre Sáenz y Portela.
La Justicia clausuró galpones, los administradores fueron detenidos, y los puesteros quedaron atrapados en una maraña judicial, en muchos casos, sin poder acceder a su propia mercadería. Desde el cierre, las y los trabajadores se manifiestan cortando parcialmente ambas manos del Camino Negro, en protestas que ayer tuvieron un punto álgido en un enfrentamiento con la policía y los manifestantes. Se calcula que hay más de 10 mil trabajadores sin poder acceder a su fuente laboral.
“La Salada se hizo sobre el trabajo de miles de personas. Hoy se castiga a todos por igual, como si todos fueran parte de la corrupción. Si los dueños hicieron algo más, que paguen, pero La Salada para nosotros es nuestra fuente de vida”, resume Alejandro, uno de los comerciantes.
El grupo La Salada procesó 34.391 millones de pesos en cuatro años. La principal feria, Punta Mogotes, movió en efectivo 26.827 millones, entre 2021 y la fecha. Urkupiña controla una tercera cuenta bancaria investigada en la que se depositaron 7.114 millones, entre 2021 y 2024.

Tras un intenso operativo de la Policía Federal Argentina (PFA) en Lomas de Zamora y Flores -zonas donde funciona la venta de indumentaria y distintos artículos- arrestaron a Castillo, acusado de evasión fiscal, lavado de dinero y asociación ilícita, en su casa ubicada en el barrio Open Door, en Luján.